Con el paso de los años las evidencias científicas sobre las dietas vegetarianas han evolucionado a pasos agigantados. La mayor organización mundial de nutrición (Asociación Americana de Dietética) ya recomienda cada cuatro años en sus estudios este tipo de dietas desde 1987. Luego, a esta iniciativa se unen otros organismos públicos de sanidad de Canadá y Reino Unido, además de ser respaldados por el Departamento de Agricultura y Salud de E.E.U.U. Pero entonces, ¿qué ventajas tienen las dietas vegetarianas con respecto a la dieta tradicional?
Según la Asociación Americana de Dietética, si la dieta a seguir está bien planteada, el consumo es completamente salud able y puede llegar a prevenir ciertas enfermedades, de hecho la dieta vegetariana correctamente planificada es apropiada para cualquier etapa del ciclo vital (Craig, Mangels, ADA, 2010).
La dieta vegetariana previene enfermedades crónicas como las cardiovasculares, ya que son causadas en su mayoría por la concentración de colesterol en la sangre. Los vegetarianos tienen menos colesterol porque algunos de los nutrientes de los alimentos que ingieren tienen fibra soluble, que reduce los niveles de colesterol. Otra de las enfermedades que previene es la obesidad que, según el Oxford Vegetarian Study, las personas que siguen dietas libres de carne y pescado tienen el IMC más bajo porque no consumen grasas animales. También es más difícil contraer enfermedades como la diabetes de tipo 2, ya que después de hacerse diversos estudios se puede decir que la ingesta de verduras, cereales integrales, frutos secos y legumbres en sustitución a las grasas animales tiene menos riesgo de contraerse la enfermedad.
Para concluir, debemos decir que en España, según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, el consumo de carne supera los niveles recomendados, pero también se ha incrementado el consumo de verduras y legumbres en las dietas, así que aún hay esperanza de que la gente se conciencie sobre la reducción del consumo de carne.
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